Esa otra vida

Todo al final va en la misma dirección.
Y así como flores se marchitan y caen, siempre otra despertará y el mismo sol que se muere en el horizonte renace en la mañana.
La ciencia descubrió que en la naturaleza nada realmente desaparece, tan solo se transforma. Se deja una existencia, para nacer en otra casi como las mariposas que dejan de ser orugas para aprender a volar. Sin embargo muchas veces esa “otra existencia” no se ve tan claramente como a las mariposas.
Pero no por eso es menos real que el mundo en que vivimos hoy.
Mientras sigamos viviendo “esta vida” tenemos que seguir recordando a quienes aun siguen a nuestros lado y nos necesitan.
Quienes ya dieron el paso a esa otra vida, son más felices cuando nuestro tiempo de llorar por ellos termina ya que saben que jamás se deja de quererlos.
Ellos cantan en la luz de su libertad.-

Ale